Producciones en gira

La última Barraca

España, 1936. Dos actrices de una compañía de repertorio llegan a la plaza donde ese día les toca función. Al llegar, sus compañeros han dejado todo el material para que monten luces y escenario, no saben si ellos hoy podrán llegar a tiempo. La incertidumbre, el miedo y el no saber que pasará no se apoderan de ellas. Mientras sacuden vestuario, ponen luces y montan el decorado harán un repaso por todo el repertorio de la compañía, monólogos, escenas, música y bailes, decidiendo que hacer si los demás no llegan.

No me niegues la paloma

Tomás Bretón vuelve a la ciudad que le vio nacer. El ya reconocido compositor vuelve a busca en su piedra dorada y en la luz la inspiración que le ayude a componer lo que será su gran obra, una ópera nacional que consiga el mismo reconocimiento que las óperas italianas. Susana y Casta llegarán para hacerle comprender que la obra por la que será reconocido ya la ha escrito. Solo tiene que admitirlo y no renunciar al mal llamado género chico, el cual le hará inmortal. Como si de un sueño se tratara, con dolor, humor y mucha música, conseguirán que el autor no les niegue la Paloma.

Juana Reina Comunera

Juana I de Castilla, visita el cuerpo de su marido como ha venido haciendo a lo largo de los últimos años, desde que falleciera en 1506. Nos encontramos en 1521, este último año los comuneros vienen pidiendo que La Reina se levante de su encierro y se enfrente a su hijo Carlos para reinar Castilla, no quieren que les gobierne un Rey que no sabe el idioma ni las costumbres de Castilla. Una vez más Juana se siente utilizada para el beneficio de otros.

Lázaro señora de…

A Salamanca llega una vendedora-pregonera busca vidas. En su carro lleva toda su fortuna. Vende frutas, longanizas, queso, pan y todo lo que tiene. Pocos se fían de ella. Cuando la venta no es buena toca contar historias y pasar el gorrillo para ver si cae algún maravedí. Después de intentar vender algún apero y no conseguirlo, es momento de empezar el espectáculo.

Soñando Dulcinea

La pluma de Cervantes nos regaló a este personaje que ya, sin remedio, forma parte de nuestro imaginario sobre el amor. Don Quijote la deseó, la amó de forma incondicional; transformó a la mujer sencilla, elevándola a la categoría de princesa, de señora que todo caballero desearía tener a su lado, batiéndose, incluso, en duelo por defender su nombre y su honor. Se enfrentó a gigantes, molinos y fantasmas solo para vencerlos en nombre de su amada.